Hoy es 29 de febrero porque es año bisiesto, un ajuste creado para sincronizar nuestros calendarios a los días que la Tierra orbita el Sol. Pero ¿sabías que un emperador tuvo la “culpa” de esto? ¿que hubo un año que duró 455 días? O ¿Qué una noche duró 10 días?
¡Te lo cuento!👇
Lo primero de todo: ¿qué son los años bisiestos? Los años bisiestos se introducen en el calendario para compensar la discrepancia entre el tiempo que tarda la Tierra en orbitar el Sol (aproximadamente 365.25 días) y el año calendario convencional de 365 días.
Para corregir esta diferencia, se añade un día extra al calendario cada cuatro años. Estos años bisiestos tienen 366 días en lugar de 365, con el día adicional conocido como el “día bisiesto” y es agregado al final de febrero, es decir hoy: 29 de febrero.
La culpa fue…de un emperador: La introducción de años bisiestos se atribuye al Calendario Juliano, implementado por Julio César en el año 45 a.C. Este calendario agregaba un día extra cada cuatro años para ajustarlo con las estaciones.
Pero empecemos por el principio. El calendario lunar egipcio se había desfasado unos tres meses con respecto a las estaciones a pesar de muchos intentos por ajustarlo. Así que Julio César, muy preocupado, quiso restaurar el orden. ¿Qué hizo?
Bajo su gobierno se pidió a los astrónomos que mejoraran el antiguo calendario romano que tenía 355 días con un mes adicional de 22 días cada dos años.
Veían que no encajaba del todo con las estaciones y decidieron usar un antiguo calendario de 365 días con un día extra cada cierto número de años.
Cesar adoptó este sistema, pero antes decreto el llamado “año de confusión”: un año de 445 días que fue el año 46 a.C. Hizo esto para eliminar de golpe la desviación que se había acumulado durante varios años.
Después se empezaron a instaurar los años de 365,25 días añadiendo un día bisiesto cada 4 años.
De este modo se crearon los años bisiestos y febrero paso a tener 30 días. Pero ¿cómo 30? Si, porque en aquel momento tenía 29 días así que añadieron uno más.
Resulta que cuando Augusto se convirtió en emperador decidió que debía tener un mes en su honor y por supuesto este debía tener los mismos días que el mes de Julio (en honor a Julio Cesar). Agosto paso a tener 31 y febrero 28, 29 si era bisiesto.
Sin embargo, el sistema no era perfecto ya que ese 0,25 de día añadido al año bisiesto hacía que el año natural fuera 11 minutos más corto que el solar, así que había una divergencia de un día entero cada 128 años.
Por eso, en el siglo XVI había un gran desfase con respecto a la época del emperador.Esto terminó afectando a las festividades cristianas y por ello el papa Gregorio XIII reformó el calendario y eliminó 10 días del mes de octubre en 1582 en su calendario gregoriano,el que usamos
¿Eliminó 10 días de golpe? Si, es el único caso de nuestra historia en que una noche duró 10 días. El 4 de octubre de1582 la gente se acostó y se levantó al día siguiente que ya no era 5, sino 15 de octubre.
Aun así, para poder corregir el desfase se hacen ajustes adicionales como como omitir el día bisiesto en los años que son múltiplos de 100 pero no de 400.
¿Esperamos que se desajuste de nuevo? La verdad es que el calendario gregoriano es bastante preciso, pero dentro de más de tres mil años podrían presentarse desajustes que habría que solucionar.
Fuente: Mar Gómez, Doctora en Físicas