Las tormentas que azotan a Buenos Aires y al área Metropolitana provocaron desde caídas de árboles hasta accidentes con electricidad. Qué coberturas nos protegen en caso de daños a los vehículos.
El temporal, con fuertes ráfagas de vientos y lluvias que azota al Área Metropolitana de Buenos Aires por estos días y mantiene en alerta naranja a varias zonas, está dejando graves consecuencias en las calles, con cortes de luz y numerosas caídas de árboles y en algunos lugares un granizo que destruyó algunos autos
Y la gran duda siempre es quién repara los daños causados por la naturaleza, las compañías de seguro o el Gobierno municipal.
Los diferentes tipos de coberturas en seguros
Hay que entender que existen distintos tipos de coberturas y cada una dará una protección según sea el caso. Cada vez que suceden temporales de magnitud e inundaciones, los planes más básicos contemplan la cobertura de Responsabilidad Civil (mínimo y obligatorio para circular en tránsito) y el que suma robo total e incendio a los siniestros cubiertos. Ninguno de esos dos prevé granizo, lluvias o consecuencias por un temporal.
Luego existen planes más completos que incluyen daños totales, robos totales y parciales e incendios parciales y totales. La más completa, la famosa cobertura contra todo riesgo, sí tiene incluidos los daños por granizo y temporales
La importancia de tener un seguro
La cultura de tener una cobertura de seguros no solo para el auto, sino también para otros bienes, como la casa, un comercio o un establecimiento más grande como una pequeña fábrica, es algo que, de a poco, se va instalando como concepto, aunque, en medio de una crisis económica como la actual, también es algo que no todos pueden afrontar, incluso sabiendo que se asume un riesgo mucho mayor por no estar cubierto. Recordemos que los seguros aumentaron como todo, porque si no se actualizan los montos, no se puede cubrir el daño.
Qué pasa cuando hay inundación
El otro gran daño que puede causar una tormenta con mucha caída de agua es la de inundación. Los autos que quedan parcialmente afectados por el agua no tienen mayor daño, pero cuando un vehículo queda semicubierto, por encima de la mitad de la carrocería, los daños no solo pueden afectar el interior del habitáculo sino fundamentalmente la mecánica, tanto la caja de velocidades como el propio motor.
Y eso se choca de frente contra la crisis económica, que hace que, en los últimos meses, se hayan dado situaciones como que, cuando hay un evento climático de magnitud, muchos usuarios de autos que dejaron de pagar la cochera y estacionan el auto en la calle, pero a la vez bajaron la calidad de la cobertura por tema costos.
Las coberturas de todo riesgo pasaron a ser casi un producto de lujo. Hubo mucha baja de todo riesgo a terceros completo, aunque hay algunas personas que prefieren subir no perder la cobertura. Y esto es un problema grave porque la mayoría de las compañías grandes contemplan que, si la pérdida es mayor al 80%, el auto se declara destruido y se debe pagar.
Pero en algunas pólizas se menciona como causal un accidente y no como un siniestro de cualquier tipo, con lo cual un árbol no queda incluido. En tanto, otras pólizas hablan de accidente y/o incendio. Lo que recomiendan los expertos es que lo mejor es que estén contempladas todas las variables posibles (siniestro total por ocurrencia de daño y/o incendio y/o robo o hurto).