El neerlandés hizo una remontada gigantesca en Brasil, le borró la sonrisa a Norris y apoyó una mano en la copa.
Hay una realidad inobjetable en la Fórmula 1, y es que la máquina prima por sobre la muñeca. Pero de tanto en tanto, cuando las circunstancias lo permiten, el talento de los pilotos es el que hace la diferencia. El Gran Premio de Brasil fue una muestra pura de esto, porque tuvo a un Max Verstappen (Red Bull) herido, que ya no corre con el auto de cabecera y que fecha tras fecha ve reducida la distancia en la punta coronar una tarde mágica. Largando desde el fondo, en el 17° puesto, el tricampeón hizo méritos para que pronto se lo llame tetra. Pasando autos a diestra y siniestra en un piso mojadísimo, sobre el que más de uno perdió el control (Colapinto fue uno), logró una victoria con olor a campeonato.
La jornada no podría haber podido arrancar peor para Max, y no tuvo que ver solo con su producción: Lando Norris (McLaren), quien está amenazando su liderato y busca arrebatarle el título, hizo la pole position e imaginó que terminaría el día sacándole muchos puntos a su rival directo. No podría haber estado más equivocado…
Al mejor estilo Brasil 2016, cuando era un novato haciendo su primera temporada en la marca de bebidas energéticas e impresionó al mundo con su danza bajo la lluvia, Verstappen se devoró a la grilla completa. Para colmo, la suerte estuvo de su lado: cuando los de adelante pararon en boxes, él decidió seguir con un neumático intermedio desgastado y, por una bandera roja producto del golpazo de Franco, conservó el 2° puesto parcial y además efectuó el cambio de goma.
El adelantamiento definitivo a Esteban Ocon (Alpine), lanzándose desde Río de Janeiro para darle algo más de color a una carrera que ya lucía inmejorable, fue un premio gigantesco. Pero la frutilla del postre la terminó poniendo Lando, perdiendo puestos por un despiste, quedando 6° y entregándole medio campeonato a Mad Max.
Verstappen estiró la ventaja y puso una mano en la copa
Ahora, el piloto de Red Bull suma 393 puntos (también hizo la vuelta rápida, que otorga un poroto) y el de McLaren cuenta con 331. Con 62 unidades de diferencia y tres carreras por delante, sólo un milagro de los grandes cambiaría la tabla general…
Las posiciones finales del GP de Brasil
Verstappen (Red Bull)
Ocon (Alpine)
Gasly (Alpine)
Russell (Mercedes)
Leclerc (Ferrari)
Norris (McLaren)
Tsunoda (RB)
Piastri (McLaren)
Lawson (RB)
Hamilton (Mercedes)
Pérez (Red Bull)
Bearman (Haas)
Bottas (Sauber)
Alonso (Aston Martin)
Zhou (Sauber)
Abandonaron: Sainz (Ferrari), Colapinto (Williams) y Stroll (Aston Martin). Excluido: Hulkenberg (Haas). No largó: Albon (Williams)
