El pequeño permanece en el área de cuidados del hospital, donde los profesionales monitorean su evolución para asegurar su recuperación total.
En las primeras horas de este sábado, un grupo de policías logró salvar la vida de un bebé que estaba al borde de la asfixia, gracias a maniobras de reanimación que permitieron estabilizar al pequeño. El hecho ocurrió en la ciudad de Resistencia, en la vecina provincia de Chaco, y el niño permanece en observación médica tras recibir atención en el hospital Pediátrico.
Cerca de las 5 de la mañana, los efectivos de la Comisaría Segunda recibieron un llamado de auxilio. La emergencia los dirigió a la calle Fray Capelli al 400, donde un bebé de apenas siete meses presentaba dificultades para respirar, generando la inmediata intervención de los agentes.
Al llegar al lugar, la madre del niño, una mujer de 34 informó a los oficiales sobre la grave situación. Con evidentes signos de desesperación, explicó que su hijo tenía problemas para inhalar aire, por lo que cada segundo contaba para preservar su vida.
Sin perder tiempo, el cabo de policía Pablo Bellier y el sargento primero Erwin Johnson tomaron la iniciativa. Decidieron trasladar de urgencia al bebé al Hospital Pediátrico, mientras realizaban las maniobras de reanimación en el trayecto, con el objetivo de mantener sus signos vitales.
Finalmente, al arribar al centro de salud, el niño fue recibido por el equipo médico, quienes diagnosticaron un cuadro de broncoaspiración. Gracias a la intervención oportuna de los agentes, el menor logró ser estabilizado y puesto bajo observación.
El pequeño permanece en el área de cuidados del hospital, donde los profesionales monitorean su evolución para asegurar su recuperación total. La pronta acción de los policías fue fundamental para salvarle la vida y evitar mayores consecuencias.
