El Gobierno autorizó incrementos de 1,6% para la electricidad y 1,85% para el gas a partir de enero. Se mantiene la asistencia hasta mayo.
A partir del consumo de enero, el Gobierno confirmó que el servicio de gas subirá 1,82% y la electricidad, 1,6%. El objetivo del Ministerio de Economía es comenzar a autorizar subas finales en las boletas por debajo del ritmo de devaluación del 2% mensual, aunque no se descarta que haya incrementos mayores cuando pase el verano y se avance con la quita de subsidios. De hecho, en electricidad, la Secretaría de Energía implementará a partir de febrero diferenciaciones más marcadas de tarifas para los consumos “en pico” o “en valle”, que establece precios distintos según la hora del día en que se consume.
OTRO INCREMENTO TARIFARIO
Todos los meses el ministro de Economía, Luis Caputo, da la autorización final para aplicar el porcentaje del aumento tarifario. No hay una fórmula establecida, ya que el objetivo actual de la gestión económica es bajar la inflación.
Por eso, todos los meses, el equipo técnico de Energía le lleva propuestas al ministro para actualizar las tarifas sin que los aumentos tengan mucho peso en el índice de precios, pero que al mismo tiempo las subas permitan que el valor no se atrase con relación a la inflación y a la devaluación mensual.
El precio de las boletas de gas y electricidad está compuesto por tres servicios más los impuestos. Reflejan el costo de generación eléctrica o producción de gas, que está subsidiado; el costo de transportar esa energía a los centros de consumo, y el de distribución, que permite que cada hogar tenga el servicio. Luego, alrededor de un 25% del precio final se explica por los impuestos nacionales, provinciales y municipales.
Los aumentos previstos para el próximo mes, que ya obtuvieron la firma de la secretaria de Energía, María Tettamanti, implican una aumento de 2,5% para las empresas distribuidoras y transportistas de gas, y de 4% para las de electricidad. También habrá una actualización del precio del gas en punto de ingreso al sistema de transporte (Pist), mientras que el valor estacional de la energía eléctrica (Pest) no se tocará. Todo dará la suba final promedio en las boletas de 1,82% en gas y de 1,6% en luz.
CAMBIOS EN LOS SUBSIDIOS
Durante enero y febrero, a su vez, el plan de la Secretaría de Energía es convocar a audiencias públicas para hacer cambios en los esquemas de subsidios. El objetivo es reducir los tres grupos de usuarios actuales, altos ingresos (N1), bajos (N2) y medios (N3) a solamente dos: los que reciben subsidios y los que no.
La idea del Gobierno es avanzar en mayo con la quita de subsidios. Actualmente, integran el grupo de N2 aquellos hogares que tienen ingresos netos menores a una canasta básica total, que actualmente equivale a $439.240. Los N3, en tanto, son las familias con ingresos mensuales totales de entre 1 y 3,5 canastas básicas (de $439.240 a $1,54 millones). Mientras que las familias de ingresos altos son las que perciben más de 3,5 canastas básicas (más de $1,54 millones).
La Secretaría de Energía obtuvo una línea del financiamiento del Banco Mundial y del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) para mejorar la implementación de los subsidios. Actualmente, hay 9,5 millones de usuarios de energía eléctrica agrupados entre N2 (6,3 millones) y N3 (3,2 millones) que reciben subsidios, de un total de 16,2 millones de usuarios. En gas, son 5,3 millones subsidiados de los 9,5 millones de usuarios totales residenciales, de los cuales los N2 son 3,2 millones.
Durante marzo y abril, además, la Secretaría de Energía finalmente implementará la revisión tarifaria integral (RTI). Es un esquema que debería llevarse adelante cada cinco años y que determina las inversiones que tienen que hacer las empresas, por un lado, y se establece el mecanismo de ajuste de las tarifas.
CORTES DE LUZ
Dado que el clima fue más benigno que lo esperado, hasta el momento no se han registrado problemas en el suministro eléctrico. De todas maneras, sigue vigente el plan de contingencia que llevó a que las distribuidoras incrementaran en 30% las cuadrillas de emergencia, el mejoramiento de redes a través de la restauración de equipos.
Los pronósticos estiman que este verano habrá picos de calor y para asistir a los hogares ante un aumento de la demanda, la Secretaría de Energía trabajó con los grandes usuarios para que bajen su demanda energética, ofrecimiento que aún no se utilizó.