Por los picos de demanda eléctrica
Referentes del equipo técnico de operaciones de la Dirección Provincial de Energía de Corrientes (Dpec) participarán este viernes de un encuentro que se realizará en la localidad de Pérez, cerca de Rosario (Santa Fé) y la cual también asistirán representes de las empresas distribuidoras de otras provincias del NEA y NOA. El objetivo es evaluar los impactos de las perturbaciones y avanzar hacia una posible solución.
Este viernes en cercanías a la ciudad de Rosario, se realizará una reunión en las instalaciones de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico SA (CAMMESA), de la que participarán equipos técnicos de empresas distribuidoras de energía de las regiones afectadas por los picos de alta demanda. El encuentro se convocó “para evaluar los impactos de estas perturbaciones y avanzar hacia una solución a dichos problemas”, según informaron desde la convocatoria.
En el marco de un verano con temperaturas extremas de calor, la demanda de energía generó colapsos en todo el Sistema Argentino de Interconexión (SADI), que repercutieron también en Corrientes, así como en toda la región, pese a que en la provincia existió este verano un registro de picos de consumo menores a los de años anteriores.
“El 2 de febrero de 2024, hace poco más de un año, se registró un pico de consumo en Corrientes de 780 MW. Este verano todavía no hemos llegado a esos picos en la provincia”, comparó a modo de indicador Jorge Albornoz, ingeniero a cargo de las Operaciones de la Dpec, quien asiste como representante de la firma distribuidora de Corrientes al encuentro con CAMMESA.
“El plan de contingencia a nivel nacional es el de morigerar el abastecimiento, algo que no está a nuestro alcance. Nosotros distribuimos. Y las medidas son para pasar los picos, básicamente con cortes de energía e importando todo lo que sea posible, por ejemplo de Brasil”, recordó el referente, a la vez que acentuó que la falta de obras de infraestructura “tanto en la generación como en el transporte”, corresponden a inversiones que la Nación debió haber ido haciendo en el tiempo años anteriores.
“Este verano, aunque con calores extremos, no hemos superado niveles históricos de picos de consumo. Sin embargo nos afecta igual, porque la situación es regional. Cuando la demanda es muy alta, por la temperatura y el uso de equipos de refrigeración, el colapso es para todos”, diagnosticó.
Asi, los representantes técnicos de Dpec, ya en viaje al encuentro a realizarse este viernes en Pérez, evaluaron que “la convocatoria para las áreas técnicas de las distribuidoras también alcanza a Chaco, Formosa, Misiones, Transener y Transea. No tiene especificaciones, solamente dice como tema central los problemas de colapsos de tensión. Seguramente (CAMMESA) brindarán mediciones con indicadores pre colapso y post colapso en cada región. Las procedencias, cómo reponer la carga, los tiempos de espera y cuestiones operativas, pero no soluciones”, deslizaron.
Deterioro histórico
Vale recordar que en noviembre de 2024, a través de una resolución de la Secretaría de Energía se publicó en el Boletín Oficial de la Nación un diagnóstico del sector energético del país que refería a “la herencia (de gestiones anteriores que) se verifica en la vulnerabilidad y el estado crítico que se ha evidenciado en tres aspectos claves: (a) en el sistema económico recaudatorio; (b) en la funcionalidad de las instalaciones para asegurar el suministro actual y futuro; y (c) en la falta de señales de mercado para la oferta y la demanda”.
Aunque el documento se extiende especialmente en lo referido a las tarifas subsidiadas, también expresa los problemas que se evaluaron tanto en la generación como en la transmisión de la energía. “En materia de generación, la cobertura de la potencia requerida durante las últimas DOS (2) décadas se ha deteriorado como consecuencia de la insuficiente inversión en equipamiento de generación que compensara el crecimiento de la demanda y el retiro de unidades con vida útil superada o ineficientes.
Que a ello se suman factores de uso del CINCUENTA Y CINCO POR CIENTO (55%) con demandas de potencias pico en días de mucho calor en verano, y en consecuencia la disponibilidad efectiva del parque de generación es insuficiente para cubrir las demandas pico de potencia sin recurrir a la importación de los países vecinos, e incluso teniendo que afectar la potencia de reserva del sistema. Que si bien el aumento de potencia instalada promedia los NOVECIENTOS MEGAVATIOS (900 MW) anuales, al ser mayormente renovable con un factor de disponibilidad que no supera el CUARENTA Y CINCO POR CIENTO (45%), la disponibilidad real resulta efectivamente mucho menor e inferior al ritmo de crecimiento del pico de demanda anual del orden de los MIL MEGAVATIOS (1.000 MW)”, explicaron.
Al respecto, días atrás desde el área de Operaciones de Dpec, coincidieron en que a nivel provincial también “la infraestructura existente es superada en varias veces a la necesaria, y hay obras postergadas por la Nación durante años que permitirían superar el colapso en todas las provincias del NEA”. Sin embargo, destacaron que “las obras que pudo ejecutar la provincia ayudaron a no tener tantas dificultades en los últimos dos o tres años”.