Cómo prevenir accidentes y por qué no hay que matarlas
Especialistas explican cómo actuar ante una mordedura y por qué es clave conocer y proteger a estos animales, fundamentales para el equilibrio ambiental.
Con la llegada del calor, aumentó la presencia de serpientes en distintas regiones de Corrientes, entre ellas la yarará —una de las especies más comunes y venenosas de Argentina—. Su aparición suele intensificarse en zonas rurales, ribereñas y en los alrededores de viviendas ubicadas cerca de pastizales o baldíos, donde buscan alimento o refugio.
En los últimos días, dos personas fueron mordidas por una yarará en la localidad de Goya. Ambas recibieron atención a tiempo y se encuentran estables
Ante este escenario, especialistas en salud y medio ambiente recuerdan la importancia de la prevención y la atención inmediata ante un eventual ataque.
Entre las principales medidas de prevención en los hogares, los expertos recomiendan:
Mantener limpios los terrenos y cortar el pasto de manera regular.
Evitar acumular escombros.
Utilizar zapatos cerrados y pantalones largos al caminar por zonas de pastizales o campos.
No introducir las manos en huecos, pilas de leña o debajo de piedras, lugares donde suelen refugiarse.
La coordinadora del Área de Difusión y Educación Ambiental del Centro de Conservación Aguará, Catalina Mancedo, subrayó que la medida de prevención más efectiva es el conocimiento: “Debemos saber convivir con ellas, reconocer sus comportamientos y perder el miedo que se instaló por la falta de información. La mejor herramienta es aprender y mantener siempre la distancia, sin intentar manipularlas”.
Además, aclaró que muchas veces se confunden especies inofensivas con yararás. “En varias ocasiones la gente cree haber matado una yarará y en realidad se trata de una culebra, que no tiene veneno. Esa confusión provoca la muerte innecesaria de animales que cumplen una función ecológica muy importante”, indicó.
Qué hacer ante una mordedura de serpiente
l suero antiofídico es el tratamiento indicado y se encuentra disponible en hospitales públicos. Su aplicación temprana es fundamental para evitar complicaciones. Desde los servicios de salud insisten en no subestimar ninguna mordedura y reforzar las acciones de prevención, especialmente en zonas donde el contacto con serpientes es frecuente.
Cuidar la fauna
Finalmente, Mancedo hizo hincapié en la importancia de proteger a las serpientes y derribar los mitos que las señalan como plagas a exterminar. “Las serpientes cumplen un rol vital en los ecosistemas, ya que muchas se alimentan de roedores que pueden transmitir enfermedades”. Por eso, remarcó la necesidad de “dejar atrás esas costumbres antiguas de matarlas, apenas aparecen”.
“Las yararás forman parte de nuestra fauna silvestre y están resguardadas por la Ley 22.421 y la Ley 14.346 contra el maltrato animal. Matarlas no solo afecta al equilibrio ambiental, sino que también es un delito. Tenemos que cambiar la mirada: no se trata de eliminarlas, sino de aprender a convivir con ellas y respetarlas desde la distancia”.

















