La nueva regla que impondrá River Plate en los contratos de los próximos refuerzos

Bajo la presidencia de Stefano Di Carlo, la dirigencia del conjunto millonario cambiará el paradigma en cuanto a los contratos de sus nuevos fichajes

El final de 2025 en el mundo River Plate marcará el inicio de una reforma profunda en el manejo de los contratos de los futbolistas profesionales. Tras una campaña que no logró colmar las expectativas ni alcanzar los objetivos deportivos planteados, y tal como anticipó Infobae, la nueva conducción encabezada por Stefano Di Carlo anunció cambios estructurales para regular los salarios de los jugadores y ajustar los costos del plantel a partir de la próxima temporada. La comisión directiva comunicó que, en adelante, los contratos tendrán un límite fijo y el resto estará sujeto estrictamente al rendimiento y los resultados deportivos.

La modificación central en la política salarial establece que la parte fija de los sueldos ocupará hasta un 60%, mientras que el 40% restante se vinculará a la productividad y a los logros alcanzados. Así lo dejó en claro el flamante mandatario en la reunión de Comisión Directiva del club de Núñez el pasado martes.

Con esta iniciativa, los futbolistas de River Plate que firmen nuevos contratos desde 2026 verán reflejada en sus salarios variables por la cantidad de partidos disputados, títulos obtenidos, goles convertidos (en caso de ser delanteros), finales jugadas y clasificación a competencias internacionales, por ejemplo. Los detalles de productividad se adaptarán a la función de cada puesto y a la jerarquía individual, según confirmaron fuentes de la institución.

El fracaso deportivo reciente dejó en claro, para la dirigencia y el entrenador Marcelo Gallardo, que se necesitaba un cambio de paradigma. El club acumuló costos elevados durante los últimos años, con contratos que muchas veces no representaban el aporte real de los futbolistas al equipo y que incluso incentivaban a algunos jugadores a permanecer en el plantel sin ser tenidos en cuenta, solo para sostener ingresos que no podrían percibir en otras entidades.

La medida incluye también una reducción en las comisiones percibidas por los representantes. A partir de 2026, ese porcentaje pasará del 7,5% al 5%. Este ajuste responde tanto a lineamientos de austeridad económica como a la intención de transparentar y equilibrar el flujo financiero del club.

Vale destacar que el plantel profesional tendrá una reestructuración, con prioridad en sostener y promover juveniles surgidos de las divisiones inferiores. El esquema de productividad premia a los jugadores por la cantidad de minutos disputados a lo largo de la temporada, la constancia en parámetros físicos como la masa muscular vinculada a las exigencias del plantel profesional, así como los logros colectivos.

La reforma, alineada entre la dirigencia y el cuerpo técnico encabezado por Gallardo, que cumplirá el rol de CEO bajo esta nueva conducción, no alterará los vínculos ya rubricados hasta la fecha. Se aplicarán únicamente a los contratos nuevos firmados a partir del ciclo 2026. En el caso de aquellos futbolistas que no logren sumar minutos o que el entrenador no incluya en sus planes, el cambio busca desincentivar largas permanencias en la institución bajo condiciones salariales elevadas y ajenas al aporte deportivo.

Tal como indicó este medio, durante esta ventana de transferencias se iniciará la reestructuración que impulsará el Muñeco junto a la nueva dirigencia. Varios futbolistas con vínculos próximos a finalizar quedarían fuera del proyecto. Entre los nombres que no continuarían figuran Federico Gattoni, quien regresaría a Sevilla tras su préstamo, y el delantero Miguel Borja, que tras perder la titularidad quedó relegado en la consideración del cuerpo técnico y analiza ofertas fuera de Núñez. También se encuentran en una situación similar referentes como Enzo Pérez -el único con posibilidades de continuar., Ignacio Fernández, Gonzalo Pity Martínez y Milton Casco.

Además de quienes finalizan vínculo, existe incertidumbre sobre la continuidad de otros integrantes del plantel. Fabricio Bustos podría dejar el club si surge una propuesta que garantice mayor protagonismo, debido a la competencia generada por el regreso de Gonzalo Montiel. Paulo Díaz, por su parte, perdió la titularidad y ante un ofrecimiento tentador su ciclo en River también podría cerrarse. La lista de potenciales salidas la completa Sebastián Boselli, quien tras un préstamo en Estudiantes de La Plata regresó pero no logró consolidarse, y su futuro estará sujeto a una evaluación de la dirección deportiva. La vuelta de Germán Pezzella, ya confirmada, limitará aún más las oportunidades para los zagueros centrales.

En cuanto a las incorporaciones, la directiva y el director técnico definieron prioridades concretas para reforzar la estructura del equipo de cara a 2026. El entrenador solicitó incorporar un mediocampista central, un lateral por izquierda, un volante ofensivo o mediapunta y un delantero. Entre las alternativas que analiza River Plate sobresale la chance de repatriar al Diablito Echeverri, actualmente sin continuidad en el Bayer Leverkusen y cuyo pase pertenece al Manchester City. Por otra parte, el atacante Luciano Gondou aparece como opción para reforzar la delantera, tras una temporada irregular en el Zenit de San Petersburgo.