El BCRA pagará un vencimiento de USD 1.000 millones con reservas

Y crece la presión sobre las metas con el FMI

El pago de un importante compromiso impactará en el objetivo pactado con el FMI y profundiza los desafíos de la autoridad monetaria para alcanzar las exigencias de acumulación de divisas en medio de la fragilidad financiera

El Banco Central de la República Argentina (BCRA) abonará el lunes un vencimiento de USD 1.012 millones correspondiente a la amortización de los Bonos para la Reconstrucción de una Argentina Libre (Bopreales 2026), utilizando parte de sus reservas, según fuentes directas consultadas por Infobae. Aunque parte del pago no impactará en la medición de reservas brutas, por la presencia de tenedores locales, sí afectará a las reservas netas, un indicador clave que la entidad deberá renegociar con el Fondo Monetario Internacional (FMI), ya que se encuentra aproximadamente USD 10.000 millones por debajo del objetivo fijado para diciembre.

La cifra resultaría menor para cualquier país con acceso a los mercados, pero este no es el caso de la Argentina. El BCRA recientemente activó USD 2.500 millones del swap de monedas con el Departamento del Tesoro de los Estados Unidos, en parte para afrontar un pago de intereses al FMI.

El objetivo de la emisión de los Bopreales fue ofrecer una herramienta para que empresas y particulares con deudas comerciales con el exterior pudieran regularizar esos pasivos, ante la escasez de divisas y las restricciones cambiarias vigentes en Argentina. La colocación de estos bonos buscó canalizar las obligaciones de pago hacia un instrumento financiero emitido por el Estado, permitiendo al Banco Central administrar la demanda de dólares, facilitar la cancelación de compromisos externos y descomprimir presiones sobre las reservas internacionales.

Un análisis de la consultora 1816 destaca que, tras la activación de un tramo del swap con Estados Unidos para saldar el último vencimiento de 2025 con el FMI y permitir al secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, retirar los dólares vendidos recientemente, las reservas netas del Central cayeron USD 3.500 millones. Según el informe, las tenencias netas del BCRA se acercan a cero y la cifra se torna negativa si se computan como pasivos los compromisos en dólares por los Bopreal a doce meses vista. “Siguiendo la metodología del EFF, quedamos alrededor de USD 13.000 millones de la meta de diciembre 2025 programa con el FMI”, resaltaron los analistas.

Por su parte, un reporte de Portfolio Personal Inversiones (PPI) señaló que al 18 de noviembre el BCRA debía incorporar USD 9.430 millones para alcanzar el objetivo de fin de año y USD 13.630 millones para cumplir con el de mitad de año. Sin embargo, tras la activación del swap con el Tesoro estadounidense y el descuento de USD 2.510 millones, el desafío inmediato se amplía a USD 11.940 millones, lo que torna aún más difícil el cumplimiento. Ante la escasez de compras públicas de divisas en las últimas semanas, los analistas consideran que la probabilidad de solicitar un nuevo “waiver” se incrementa. La situación pone en evidencia la tensión entre la necesidad de acumular reservas y la estabilidad cambiaria, que se mantiene gracias a un dólar alejado del techo de la banda.

En esa línea, la Fundación Capital sostuvo que “la clave de un esquema exitoso es la credibilidad” y remarcó que un mayor nivel de reservas internacionales podría limitar la incertidumbre y aportar previsibilidad al sistema cambiario y monetario. Los expertos subrayaron que, mientras las reservas brutas (que incluyen el swap con China aún no activado) apenas superan el 6% del PIB, en otros países de Latinoamérica alcanzan valores por encima del 13%. Además, puntualizaron que la experiencia argentina durante la Convertibilidad y antecedentes internacionales muestran que una mayor demanda de dinero no necesariamente se traduce en inflación ante compras de dólares del Tesoro o del BCRA, argumento que mantiene el Gobierno para limitar la adquisición de divisas sin restricciones.

Desde Cohen Aliados Financieros advirtieron que el “frente externo sigue mostrando debilidades”, factor que complica la reducción del riesgo país. Este índice, si se estabilizara en torno a los 400 puntos básicos, abriría la posibilidad de que Argentina retorne a los mercados voluntarios de deuda para refinanciar obligaciones externas. El informe también señala que, sin señales de nuevas compras de dólares, la acumulación de reservas dependerá de la respuesta en las próximas licitaciones y de la capacidad del tipo de cambio para adaptarse a la reciente reducción de tasas.

Los pasivos del Banco Central incluyen USD 18.291 millones del swap con China, USD 15.897 millones en encajes en dólares, USD 2.500 millones del swap con Estados Unidos, USD 3.295 millones de repos de SEDESA y otros repos a un año, y USD 99 millones en préstamos de organismos internacionales.

En la última revisión con el FMI, la acumulación de reservas fue objeto de ajuste, y el ministro de Economía, Luis Caputo, se comprometió a cerrar el año con USD -2.600 millones de reservas netas. Sin embargo, la asistencia financiera adicional de Estados Unidos, a través de un swap de USD 20.000 millones, ha modificado la evaluación oficial. “No subestimamos la importancia de acumular reservas; para nosotros es una prioridad. Pero, actualmente, hay una separación entre la acumulación de reservas y el pago de nuestras deudas. La situación ha cambiado, existen nuevas alternativas desde lo financiero. Tenemos el swap chino, el apoyo estadounidense y otras opciones, incluyendo negociaciones con bancos”, afirmó Caputo durante la Conferencia Industrial de la UIA.