Impulso clave en la formación de desarrolladores de Software (Nivel1)
El jueves 27 de noviembre se llevó a cabo en la Usina del Conocimiento, ubicada en el Parque Tecnológico Goya, la ceremonia de entrega de certificados del Bootcamp Usina, el programa de formación en desarrollo de software. Esta iniciativa marca un hito importante, ya que constituye una primera entrada, pero muy seria, al desarrollo de software en la región.
El evento contó con la presencia de autoridades que brindaron palabras de bienvenida, incluyendo al Lic. Luciano Rolón, secretario de Modernización, Innovación y Desarrollo Tecnológico de la Municipalidad de Goya; el Lic. Marco Sosa, Rector del Instituto Tecnológico Goya; y el Profesor Damián Tymosuk, a cargo del desarrollo de las clases.
UN PROGRAMA INSPIRADO Y CON GRAN INTERÉS
El Lic. Luciano Rolón, secretario de Modernización, destacó la importancia de la iniciativa, mencionando que el Bootcamp Usina se inspira en “El Informatorio” de Chaco, un programa exitoso con más de 10 años de trayectoria. La primera edición del Bootcamp ha sido un éxito rotundo en el interés generado. Más de 200 personas se inscribieron al curso, y aunque 191 comenzaron, la primera etapa concluyó con 18 estudiantes que recibieron el reconocimiento.
“La verdad que es un programa muy bueno. Esta es la primera edición, pero esperemos tener otras ediciones y esta es la primera etapa y en febrero vamos a continuar con la segunda y tercera etapa.
Esto es para destacar, que entre los 18 alumnos que culminaron esa primera etapa, hay una gran diversidad de profesiones, desde quien trabaja en la inspección de tránsito, otros que son emprendedores y ya se vienen desenvolviendo en áreas vinculadas a la Economía del Conocimiento, hasta personas que hace muchos años atrás tuvieron el interés en la tecnología y ahora con el Bootcamp Usina vieron esa puerta de acceso para retomar el camino en la formación en desarrollo de software y esto es muy valorable para nosotros”, expresó Rolón.
ALTO NIVEL DE COMPETENCIA ADQUIRIDA
El Profesor Damián Tymosuk, encargado del desarrollo del curso, señaló que las 18 personas reconocidas presentaron un proyecto el cual fue evaluado por distintos programadores. Estos proyectos aprobados demuestran un conocimiento impresionante por parte de los alumnos que terminaron la primera de tres etapas, muchos de los cuales iniciaron desde cero.
El profesor Tymosuk precisó que, tras completar el Nivel I, los participantes ya poseen una base suficiente para afrontar, por ejemplo, el ingreso a la tecnicatura universitaria en programación. Los estudiantes han adquirido un nivel de competencia que los sitúa en una condición de trainee, previo a ser junior, en el mundo de la programación. Además, este curso sirvió como filtro para que los inscriptos descubrieran si el mundo de la programación les gustaba y desearan continuar.
Un factor clave es que el mundo laboral está pidiendo cada vez personal más calificado, y la edad no es un límite para estudiar o comenzar a trabajar en este campo, ya que lo que una empresa evalúa es la competencia y la capacidad de la persona para resolver problemáticas.
PROYECCIONES PARA EL 2026
El programa completo del Bootcamp Usina consta de tres etapas. La primera etapa tuvo una duración de 2 meses.
Se ha consensuado con los participantes que la segunda etapa se inicie en febrero del 2026. Esta etapa constará de 3 meses e incluirá contenidos superiores, más modernos y requeridos por el ámbito laboral. Los alumnos verán bases de datos y servidores relacionales, creación de servidores con Express, y trabajarán con un sistema de frontend (React). Además, avanzarán al lenguaje Typecript, un lenguaje de programación más estructurado, elevando significativamente su competencia y conocimientos.
La tercera etapa del programa está prevista para el final y se enfoca en aspectos cruciales de desarrollo profesional:
• Herramientas de habilidades blandas y desarrollo de carreras.
• Trabajo en proyectos reales para obtener experiencia práctica.
• Acompañamiento para desarrollar un proyecto concreto de emprendedurismo hasta alcanzar un Producto Mínimo Viable (MVP).
Para asegurar que los estudiantes mantengan los conocimientos adquiridos durante las vacaciones, se planificó dejarles ciertas actividades y proyectos para que sigan practicando y retomen la formación con fuerza en febrero.
















