El oficialismo arrancó el debate del presupuesto 2026 y le ganó una pulseada clave a la oposición

Impuso su criterio para que en el debate en particular se eluda la votación de cada artículo, entre ellos el que deroga las leyes de financiamiento a las casas de altos estudios y emergencia en discapacidad

Con el quorum justo gracias al apoyo de los bloques aliados, el oficialismo arrancó en la Cámara de Diputados el debate de la ley de presupuesto 2026, una de las prioridades del Gobierno en el debut de las sesiones extraordinarias.

La Libertad Avanza sufrió hasta último minuto para alcanzar el quorum, pero pocos minutos después respiró tranquilo cuando, ya iniciado el debate, logró imponer su criterio para que, llegada la instancia del debate en particular de la iniciativa, se eluda la discusión puntual de cada uno de los artículos. Uno de los más polémicos es el que establece la derogación de las leyes de financiamiento universitario y de emergencia en Discapacidad.

Ambas normas fueron suspendidas por el Gobierno pese a que fueron insistidas por ambas cámaras del Congreso el año pasado.

A sabiendas del riesgo que podía correr en esa instancia, en el arranque de la sesión el oficialismo propuso, en la voz del jefe de bloque Gabriel Bornoroni, que la votación en particular se realice por capítulo y no por artículo. Una jugada pergeñada para eludir el tratamiento puntual del artículo 75, el que establece la derogación de las dos leyes de la polémica.

La oposición pegó el grito en el cielo. “Esto impedirá que los diputados se expresen sobre los artículos en particular. Va a ser más engorroso. ¿Queremos que el debate sea a los empujones y sin nitidez o con transparencia?“, planteó Pablo Juliano (Provincias Unidas)

“El que vote por derogar las leyes de discapacidad y de universidades que dé la cara. El que vote por reventar las escuelas técnicas, que dé la cara −desafió Myriam Bregman (FIT-U)−. Basta de hacer trampitas de procedimiento reglamentario”.

A ellos se sumó Germán Martínez, de Unión por la Patria. “Hay que ir a una votación por artículo a demanda de los legisladores; así se trabaja con el presupuesto. No hay que camuflarse más para perjudicar a los discapacitados, la comunidad universitaria y las escuelas técnicas”.

Finalmente, el oficialismo impuso su criterio con 130 votos positivos frente a 112 negativos y una abstención. Tanto Pro como la UCR -a excepción de Karina Banfi, quien se abstuvo- apoyaron, como así también los bloques de MID, Elijo Catamarca, Independencia -que responde al gobernador Osvaldo Jaldo-, Innovación Federal (Misiones y Salta), Por Santa Cruz y Producción y Trabajo, que responde al gobernador de San Juan Marcelo Orrego.

Los libertarios respiraron de alivio. Descuentan que, pasado este tramo difícil, no tendrán contratiempos para aprobar en general y en particular la iniciativa. Da por hecho que sumará el apoyo del flamante interbloque Fuerza del Cambio −que aglutina a Pro y de la UCR− y a los bloques provinciales a los que el Gobierno se encargó de endulzar con concesiones varias.

Por caso, a última hora de ayer accedió a incluir en el texto la promesa de que le girará a la ciudad de Buenos Aires los fondos de coparticipación pactados en la Corte Suprema. Empero, los tiempos y los montos quedarán supeditados a la decisión del jefe de Gabinete, Manuel Adorni.

El proyecto de presupuesto 2026 enviado por el Poder Ejecutivo prevé un crecimiento de la economía del 5% del PBI, una inflación anual del 10,1% y un tipo de cambio de $1423 para diciembre de 2026, más bajo que el valor actual. Además, proyecta un aumento del 10,6% en las exportaciones y del 11% en las importaciones. En materia fiscal, el Gobierno estima un superávit primario del 1,5% del PBI y un superávit financiero −una vez pagados los intereses de la deuda− del 0,2% del PBI.

Por esta y otras razones, el kirchnerismo, al igual que Provincias Unidas y la izquierda anticiparon que no acompañarán el proyecto del oficialismo. Aseveran que las proyecciones macroeconómicas previstas en la iniciativa no son sostenibles. Por esa razón, presentaron sendas propuestas alternativas; el kirchnerismo, por caso, no solo insistirá en la plena vigencia de la ley de emergencia en discapacidad y los fondos para la emergencia pediátrica, sino también la continuidad del régimen de zonas frías, la automaticidad de las asignaciones familiares, la recomposición de ingresos jubilatorios afectados por el cambio de fórmula y la actualización del bono previsional.

En la sesión −que se extendería por al menos doce horas− se debatirán otros dos dictámenes también prioritarios para el Poder Ejecutivo. Uno de ellos es el que propone incentivar el uso de los dólares atesorados sin declarar −conocido como ley de “inocencia fiscal”− y el que castiga con penas de prisión a los funcionarios que aprueben y ejecuten presupuestos con déficit fiscal. Este último recibió duras críticas opositoras por inconstitucional.